“Cómo nos llamamos configura nuestra personalidad y condiciona cómo nos ve el resto”. ¿Sabías que lo que dice la psicología respecto a la importancia de los nombres propios en las personas también es aplicable a las marcas? Mientras que los nombres propios son elegidos por los padres, en las marcas el naming es la herramienta que permite definir la identidad de marca y destacar en un mercado competitivo. Un nombre atractivo, fácil de recordar, y alineado con los valores del despacho, empresa o actividad profesional, facilita la conexión emocional con los clientes, potencia las ventas y atrae nuevos clientes. En definitiva, un buen nombre aumenta la visibilidad de una empresa o profesional y le da una posición más sólida en el mercado. Aquí te ofrecemos 10 claves para construir un naming eficaz.
1. Define tu identidad de marca
Antes de elegir un nombre, es fundamental hacerse algunas preguntas y tener clara la esencia de tu marca: ¿cuáles son tus valores?, ¿cuál es la misión de tu despacho o empresa?, ¿qué mensaje quieres transmitir…? En todos los casos, el nombre debe estar alineado con la personalidad de tu marca para transmitir autenticidad y profesionalidad, particularmente en el caso de un despacho de abogados.
2. Crea una estrategia de negocio
Es importante que el nombre de tu marca no solo te represente, sino que también esté alineado con tu estrategia de negocio o actividad profesional. Si el nombre es coherente con esos objetivos, te ayudará aumentar la confianza del cliente y a posicionarte mejor en el mercado. En este sentido, evita utilizar referencias demasiado locales si planeas expandirte, y asegúrate de que el nombre pueda adaptarse a distintos mercados y culturas.
3. A veces menos, es más
Apuesta por la simplicidad. Un nombre debe ser fácil de recordar y pronunciar. Los nombres complejos o difíciles de escribir pueden crear barreras para los clientes potenciales. Por ejemplo, Apple o Mercadona, que son marcas exitosas con nombres simples y directos. En el caso de la abogacía, el despacho internacional Baker McKenzie eliminó la “y” sajona (&) original (Baker & McKenzie) para dar un toque más moderno, restar personalismos y enfatizar su enfoque global en su proceso de expansión internacional. Un caso similar es el del bufete español Uría Menéndez.
4. Conexión emocional
Elige un nombre que genere una carga emocional positiva. Las emociones juegan un papel importante en la toma de decisiones del consumidor. Muchas veces es la razón por la que el cliente se decanta más por una marca que por otra. Por ejemplo, las siglas de IKEA. ‘IK’ son las del fundador de Ikea (Ingvar Kamprad). La ‘E’ es el nombre de la granja en Suecia donde se crió (Elmtaryd) y la ‘A’ es el nombre del pueblo donde está la granja (Agunnaryd).
5. Sonoridad y ritmo
La sonoridad es clave del naming. Un nombre que suene bien y que tenga un ritmo agradable es más probable que sea recordado. Además la fonética puede transmitir sensaciones: un nombre corto puede transmitir dinamismo, mientras que uno más largo y suave puede proyectar confianza.
6. Piensa a largo plazo
Evita los nombres que te limiten. Si bien hoy te puedes enfocar en un nicho específico, un buen nombre debe ser lo suficientemente amplio para permitir el crecimiento y la evolución de la marca.
7. Di no a las tendencias pasajeras
Los nombres basados en modas o tendencias actuales pueden volverse obsoletos rápidamente. Es mejor optar por algo más atemporal, que tenga relevancia no solo en el presente, sino también en el futuro.
8. Originalidad y diferenciación
Investiga a tu competencia y asegúrate de que el nombre que elijas sea único. Evita caer en clichés o nombres genéricos que puedan confundirse con otras marcas. Un nombre único ayuda a que tu marca sea reconocible por las personas. En este proceso, busca en Google AdWords nombres similares y palabras claves para saber si existe un nombre parecido al que quieres usar. Además, si tu sector está saturado, añade un elemento diferenciador que destaque, como puede ser la especialidad (conceptos como “Legal”, “Juris”, “Lex”, “Asociados”) o valores como justicia, integridad o protección, del tipo “Fortis” o “Equitas”. Una vez elegido, asegúrate de la legalidad del nombre y regístralo para asegurarte su uso exclusivo.
9. Realiza pruebas
Antes de decidirte por un nombre definitivo, prueba su impacto con un grupo de personas de confianza. Pregunta qué les transmite y recoge sus impresiones, ya que estas primeras reacciones pueden ofrecerte valiosa información.
10. Valida el dominio y redes sociales
Y una última recomendación, asegúrate de que el dominio y los nombres de usuario en redes sociales estén disponibles para tu nombre elegido. De esta manera, ayuda a mantener una imagen de marca unificada.
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