¿Has oído hablar de B Corporation, B Corp o Empresas B? Es la última tendencia en empresas responsables. Este movimiento, que nació en Estados Unidos en 2006, es un gran desconocido en nuestro país, aunque ya hay empresas con sello español que forman parte de las más de 3.000 empresas certificadas de 70 países y 150 sectores económicos. La visión es común en todas estas organizaciones: generar un impacto positivo con su actividad.
En España también somos B
Almanatura fue la empresa pionera en España en certificarse como BCorp en 2013. ¿Su propósito? Empoderar a la población rural, reactivando las zonas rurales y revalorizando la vida en el campo. Para conseguirlo actúa en cuatro frentes, a través de alianzas público y privadas: el empleo, la educación, la salud y la tecnología en los pueblos.
Le siguieron muchas más, como 21 gramos, una agencia de branding y comunicación especializada en sostenibilidad que, además de ayudar a las marcas a potenciar su gestión ética, impulsa el conocimiento y una educación con valores a través de su metodología para proyectos de divulgación y sensibilización en el ámbito educativo.
Por su parte, Cuento de Luz se centra en los niños y les propone con sus historias navegar con la imaginación, a través de relatos que contribuyen a cuidar nuestro planeta, respetar las diferencias y promover la paz.
Si Cuento de Luz despierta conciencias, Visualfy es un proyecto único en que las personas sordas y oyentes trabajan para eliminar las barreras de accesibilidad para las personas con pérdida auditiva.
Son solo algunos ejemplos de las empresas B de nuestro país, un movimiento de líderes que cada vez hace oír más sus voces en todo el mundo.
¿Quieres ser B?
Ser una B Corp va más allá de la certificación de un producto o servicio, explican desde B Lab. Se trata de una certificación que mide el desempeño social y ambiental del conjunto de la compañía y define su identidad empresarial.
Para conseguir este certificado, las empresas se someten a una rigurosa evaluación, que se basa en la metodología IRIS, en cinco categorías clave: comunidad, trabajadores, medio ambiente, gobernanza y cliente. Estas compañías buscan la rentabilidad económica, pero a través de un negocio cuyo fin es resolver una problemática social o un desafío medioambiental.
Además, la empresa se compromete a mantener esas buenas prácticas, medir su impacto y ser transparente. Asimismo, su desempeño se mide o renueva cada dos años.
Si tú no tienes una empresa, también puedes unirte al Movimiento B. Desde B Lab Spain advierten: “no solo las empresas pueden ayudar a construir una economía inclusiva y sostenible que funcione para todos. Las personas y organizaciones de todo tipo, desde administraciones, organizaciones sociales e inversores hasta universidades y redes empresariales, también tienen una clara responsabilidad”.
El Movimiento B lo forman todos los que trabajan, compran, invierten, aprenden, enseñan o apoyan a las empresas que se esfuerzan por crear un mundo mejor. ¿Tú eres B?
