Si te estás preguntando qué puedes hacer para celebrar el Día de la Eficiencia Energética este 5 de marzo, aquí tienes la respuesta: optimizar las instalaciones de tu despacho, puede ser tu contribución para frenar el cambio climático. Te ofrecemos varias alternativas para conseguirlo, con el aliciente extra del ahorro que puedes conseguir con cada una de ellas.
No se trata de perder confort en el espacio de trabajo, más bien de mantener el mismo, pero consumiendo menos recursos. En esencia, las oficinas consumen energía eléctrica para la climatización, red informática, otra maquinaria e iluminación, por lo que la medida estrella pasa por la optimización de esas instalaciones.
Es cierto que en muchos casos requieren de cambios e inversiones, pero con la recompensa de reducir la factura de la electricidad desde el primer día. Recuerda que según la organización de consumidores Facua, el pasado mes de febrero “ha sido el tercer recibo más caro a nivel histórico”, el 115,5% más caro con respecto al de febrero de 2022 en la tarifa semirregulada.
Objetivo eficiencia energética en el despacho
Una contabilidad energética óptima es aquella que ofrece un buen balance entre confort y consumo. La Guía de ahorro y eficiencia energética en oficinas y despachos, editada por la Comunidad de Madrid, realiza una serie de actuaciones con estimaciones del ahorro a partir de la evaluación de varios casos prácticos.
Unas alternativas que explicamos sin entrar en precisiones técnicas. La propuesta es ofrecer pistas para que puedas buscar la solución más conveniente para tu despacho y más tarde, consultes a un profesional.
Eficiencia en el sistema de climatización
Por cada grado centígrado que se incrementa la temperatura de un edificio o vivienda, el consumo energético aumenta un 7%, al igual que las emisiones de CO2, según explican en IDAE. Su recomendación es ajustar el horario de calefacción a la ocupación real de la oficina y ajustar el termostato entre 20º y 21º. Sin duda, actuar sobre el sistema de climatización es el mejor medio de ahorro para la factura energética.
Bombas de calor con recuperación de calor. Ahorro estimado: 40%
Este sistema mejora el rendimiento de la maquinaria permitiendo la recuperación de calor para uso de agua caliente sanitaria (ACS). El beneficio se logra mediante un adecuado balance entre la energía entrante y saliente. En consecuencia, se logra la reducción de consumo eléctrico de la ACS para consumo.
Bombas de calor con sistema inverter VRV/VRF. Ahorro estimado: 55%
Estos dispositivos requieren de menor potencia de arranque y disminuyen el consumo eléctrico durante el funcionamiento. Se trata de una de las tecnologías en auge, ya que el sistema inverter VRV/VRF permite un caudal de refrigeración variable, controlando mejor la temperatura y el consumo.
Climatización por aerotermia. Ahorro estimado: 60%
Implica la sustitución del equipo por una bomba de calor aerotermia, muy eficiente desde el punto de vista del consumo. La aerotermia es una energía renovable que aprovecha la energía térmica existente en el aire y la transfiere hacia el interior para generar calefacción, refrigeración y ACS. De modo básico, lo logra utilizando un intercambiador y un ventilador de ambiente exterior. Un sistema que en alianza con suelos radiantes y radiadores de baja temperatura puede mejorar su eficiencia.
Eficiencia en el sistema de iluminación/strong>
Se calcula que el gasto por iluminación en una oficina representa el 20% de la factura en energía eléctrica. Algunas de las medidas para ser más eficiente son:
Temporizadores y detectores de presencia en zonas de paso. Ahorro estimado: 40%
Es una de las medidas más básicas de ahorro por la facilidad de instalación y su bajo coste. Mejora que se produce por la reducción del tiempo de uso de unas lámparas que de otro modo suelen estar toda la jornada en funcionamiento. Entre toda la oferta de soluciones, se impone la bombilla LED con sensor de movimiento por microondas. Estas se encienden cuando detectan movimiento en un rango máximo de 6 metros, y pasados 60 segundos, si no detectan nuevo movimiento se apagan.
Cambio a lámparas LED. Ahorro estimado: 60%
Solución mil veces recomendada. Sustituir las lámparas incandescentes y fluorescentes en la oficina es la primera de las medidas. Como es conocido, larga vida útil y elevado rendimiento en consumo, son sus dos principales características. En las zonas de trabajo se recomienda un tono de luz neutro o frío.
Iluminación exterior, también con LED. Ahorro estimado: 60%
Tan solo un recordatorio de que el LED es también más eficiente para la iluminación de aquellos despachos con luminosos a calle, luz exterior sobre fachada o en zona ajardinada.
Eficiencia en el sistema de agua
Según el MIT (Massachusetts Institute Technology ), en 2050 el 52 % de la población mundial vivirá en áreas con escasez de agua. Corregir esta predicción es misión de todos.
Limitador de caudal. Ahorro estimado: 20%
Aunque la factura del agua no suele despertar gran preocupación en las cuentas de administración, todos debemos acostumbrarnos a reducir su consumo. La instalación del limitador de caudal es la medida más básica para regular el exceso de flujo.
Grifos monomando. Ahorro estimado: 15%
Si en tu oficina aún existen griferías de doble mando, debes saber que además de obsoletas pecan de ineficientes.
Otras actuaciones
Grifos con temporizador en lavabos. Sistemas WC Stop para cisternas, con ahorros del 70% del agua. Regeneración de agua de lavado y duchas para aprovechamiento en inodoros, en el sistema de agua como en el de climatización e iluminación, son muchas las medidas a adoptar para celebrar el Día de la Eficiencia Energética.