Hace 112 años, el 14 de mayo de 1908, se promulgó la primera ley general aseguradora en España, y desde entonces, cada 14 de mayo se conmemora el “Día Mundial del Seguro”.
Aquella ley sirvió para sentar las primeras bases legislativas del seguro en nuestro país y ese mismo año también nació el Instituto Nacional de Previsión, la antesala del actual sistema de Seguridad Social.
En el día de hoy, queremos hacer especial hincapié en cuáles son las claves que debes tener en cuenta a la hora de elegir tu seguro de vida.
1. ¿Por qué es importante tener un seguro de vida?
Un seguro de vida es un instrumento financiero que protege económicamente a nuestra familia o a los nuestros en caso de fallecimiento o invalidez parcial o permanente. El objetivo que subyace es que puedan continuar con su vida con una tranquilidad financiera; por ejemplo, que nuestros hijos puedan seguir estudiando, que la hipoteca o los préstamos no se vuelvan una carga imposible de pagar. Pero, ¿qué factores influyen a la hora de contratar un seguro de vida?
2. Haz bien los números
Para saber cuál es el seguro de vida que se adapta mejor a tus necesidades, debes contestar a estas preguntas:
- ¿Cuál es tu situación económica, tus deudas y gastos? Tienes que evitar dejar cargas financieras a tus seres queridos.
- ¿Cuáles son tus responsabilidades familiares? Cuantifícalas.
- ¿Qué ingresos harían falta para mantener la calidad de vida de tu familia y durante cuántos años? Lo ideal sería cubrir entre 5 y 10 años según la edad de tus hijos, etc.
Esta reflexión sobre qué necesidades debes cubrir te ayudará a establecer el capital asegurado que influirá en las cuotas a pagar.
3. Tú decides
Una vez que tienes claro qué quieres proteger, escoge un seguro respaldado por una compañía segura, sólida y confiable; no olvides que se trata de un producto financiero a largo plazo. En este sentido, el coste es importante (sin olvidar los gastos asociados), pero no lo es menos la calidad.
Aunque el seguro de vida en sentido estricto cubre el fallecimiento, es recomendable contar también con una póliza para hacer frente a accidentes para que tú y tu familia estéis cubiertos pase lo que pase (incapacidad permanente absoluta o parcial).
Además, tu seguro debe adaptarse a ti y ser flexible, tú debes decidir qué coberturas y qué cantidades deseas asegurar y cómo lo percibirán los beneficiarios. Y también poder ajustarlas o modificarlas según tus circunstancias personales y pagarlo en cómodos plazos.
4. Beneficiarios y letra pequeña
Tú decides libremente a los beneficiarios de tu póliza y debes poder modificarlos tantas veces como quieras.
Además, no olvides leer la letra pequeña. Analiza cuáles son las exclusiones del seguro de vida para asegurarte en qué casos obtendrías cobertura. Si tienes cualquier duda, déjate asesorar.
5. Di la verdad
Ha llegado el momento más importante de la contratación: la solicitud. Presta la mayor atención posible, responde a las preguntas de forma veraz y sin omitir ningún dato solicitado por la entidad aseguradora. Ten en cuenta que en buena parte de los seguros de vida que no se cobran la causa está en problemas o inexactitudes con los datos de la solicitud.